LOCURA DE AMOR
(Esp) Cifesa, 1948. 119 min. BN.
Pr Ej: Juan Ortuoste e Iñaki Núñez. G: Manuel Tamayo (nieto del autor de la obra), José María Pemán, Carlos Blanco y Alfredo Echegaray, inspirado en la obra “La locura de amor” de Manuel Tamayo y Baus. Ft: José F. Aguayo. Mt: Juan Serra. DA: Sigfrido Burman. Vest: Manuel Comba. Ms: Víctor Reyes. Dr: Juan de Orduña.
Int: Aurora Bautista, Fernando Rey, Sara Montiel, Jorge Mistral, Manuel Luna, Juan Espantaleón, Jesús Tordesillas, Eduardo Fajardo, Ricardo Acero, Manuel Arbó, Félix Fernández, Arturo Marín, Conrado San Martín, Luis Peña, María Cañete, Nicolás Perchicot, José Bódalo.
SINOPSIS: Drama romántico que narra la trágica historia de Juana la Loca, hija de los Reyes Católicos. Casada con el disoluto Felipe el Hermoso, fue víctima del desmedido amor que profesaba a su esposo. Cuando éste falleció prematuramente, su muerte la dejó sumida en una necrófila enajenación que la impedía percibir la realidad que la circundaba, siendo fácil presa de los ambiciosos e intrigantes miembros de la corte.
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Nadie como ella supo potenciar exaltadas emociones y ostensibles estallidos de locura. |
COMENTARIO: Uno de los hitos del cine español más pomposamente “histórico” (y por lo tanto sin poder descartar el mensaje subliminal del régimen contenido en los pliegues del argumento y en su carga alegórica). Pero lo cierto, es que ya desde un guión muy bien urdido y jalonado de lances dramáticos, intrigas palaciegas, amores no correspondidos, celos, suspense, venganzas y duelos, quería asemejarse a aquellas viejas producciones hollywoodenses en las que en 90 minutos eran capaces de contarnos con ritmo, armonía y eficacia dramática, un montón de cosas (lo de menos era el rigor histórico).
Juan de Orduña, dentro del constreñido panorama del cine español de aquellos días, era un realizador que se movía con cierta comodidad en los diferentes géneros que abordaba y a finales de los años cuarenta había adquirido una innegable habilidad narrativa, las más de las veces, al servicio de productos de detestable planteamiento. No obstante, en la puesta en escena de LOCURA DE AMOR estuvo especialmente inspirado, consiguiendo una de sus obras más redondas y engoladamente estilizadas. Exagerada y folletinesca, con una demencial utilización de recursos expresionistas unas veces, operísticos otras, rozando frecuentemente lo bufo, la cinta de Orduña conseguía salvarse del más espantoso de los ridículos en virtud de una casi milagrosa combinación (probablemente, no calculada) de las dosis de todo eso y más. Pero el verdadero número de fuerza de la película descansa sobre el fascinante desmadre interpretativo de una exaltada y declamatoria Aurora Bautista en plan bigger than life.
Nota: la película debe ser considerada una superproducción sin precedentes en aquel tiempo (su costo superó la exorbitante suma de cuatro millones de pesetas) y el esfuerzo de Cifesa, no obstante, fue premiado con un gran éxito de taquilla.
Sorprendente elección, Teo, después de “Charada” (tal vez sean los efectos de la canícula). En cualquier caso, la película es un auténtico delirio en el más amplio sentido que pueda abarcar este término. Tanto es así que viéndola hoy, con ojos como platos, podamos llegar a sentir algo así como una “admirativa jocosidad”, valga el contrasentido.
ResponderEliminarSaludos.
Sí, puede que el calor también sea un factor a tener en cuenta. Lo cierto, es que hace unos días en una terraza comentando con unos amigos sobre el extraño eclipse profesional de una actriz tan interesante como Pilar López de Ayala, por una súbita asociación de ideas, acudió a mi mente este mítico título de Juan de Orduña. Y qué quieres que te diga, tienes razón en tu forma de describirla. Aunque también es verdad que la película da para mucho más.
EliminarUn saludo.
Sublime Aurora Bautista. Nunca la sobreactuación de una actriz llegó a esos estratosféricos niveles de ardorosa convicción. La película, aparte del fuerte olor a naftalina que desprende, se ve como uno de aquellos esfuerzos del “régimen” utilizando el cine patrio para sublimar a su conveniencia pasajes de nuestra Historia.
ResponderEliminarSaludos!
Aurora bautista permanece en nuestra memoria mayormente por sus papeles trágicos pero fue una actriz dúctil, dependiendo del guión y director que le tocaran. Por ejemplo, estaba estupenda acercándose a la Jennifer Jones de DUELO AL SOL en aquel drama pasional cercano a un western titulado LA GATA (1955). Por cierto, la primera película española rodada con el sistema CinemaScope. Y no nos olvidemos de su matizada y magistral composición para LA TÍA TULA (1964).
EliminarUn saludo.
Cine rancio de cartón-piedra y lo que es peor, cine para “distraer” y embaucar a aquellos pobres espectadores de la España franquista que tenían que conformarse con estos productos que “revisaban” la Historia en clave grandilocuente y zarzuelera. Pero si hemos de salvar algo de “Locura de amor”, me inclino por un par de composiciones de pictórica estética que por un momento me recordaron a “Queen Christina”, además de una prometedora jovencita de veinte años llamada Sara Montiel y la impar Aurora Bautista dándolo todo. Faltaría más.
ResponderEliminarUn saludo.
Pues ahí queda tu afilada impresión sobre la película de Juan de Orduña. Por supuesto, la encuentro muy acertada aunque no sé qué decir de esa inesperada conexión que estableces con el clásico de Rouben Mamoulian pero si lo sentiste así, tendrás razón.
EliminarUn saludo.