GIGANTE (Giant)

(USA) Warner Bros. / George Stevens, 1955-56. 201 min. Color.

Pr: George Stevens y Henry Ginsburg. G: Fred Guiol e Ivan Moffat, basado en la novela de Edna Ferber. Ft: William C. Mellor y Edwin DuPar. Mt: William Hornbeck, Philip Anderson y Fred Bohanan. DA: Boris Leven. Vest: Marjorie Best y Moss Mabry. Ms: Dimitri Tiomkin. Dr: George Stevens.

Int: Elizabeth Taylor, Rock Hudson, James Dean, Carroll Baker, Mercedes McCambridge, Chill Wills, Jane Withers, Dennis Hopper, Rod Taylor, Sal Mineo, Elsa Cárdenas, Earl Holliman, Judith Evelyn, Paul Fix, Alexander Scourby, Robert Nichols, Fran Bennett, Carolyn Craig, Monte Hale, Sheb Wooley, Charles Watts, Napoleon Whitting, Victor Millan.

Leslie (Elizabeth Taylor), pese a estar prometida, inmediatamente se siente atraída por apuesto tejano que visita a su familia en Maryland.
El ganadero Jordan "Bick" Benedict Jr. (Rock Hudson) ha viajado desde Texas para comprar a los Lynnton un brioso caballo y llevárselo a su rancho.

Durante los días que permanece como invitado en esa mansión, Jordan también cae bajo el influjo de la bella Leslie. En su regreso a Texas, además del caballo se lleva a Leslie ya como su esposa.
Jordan no soporta la presencia de Jett (James Dean) en el rancho, pero ha de admitirla porque el díscolo peón cuenta con la simpatía de su hermana Luz (Mercedes McCambridge).
Luz es una mujer enérgica y hombruna y siente por el joven Jett una callada predilección, tal vez un afecto de carácter maternal.
Jordan y Luz administran la gigantesca extensión de su rancho. Son dos hermanos que se quieren pero no acaban de entenderse.
Tras la muerte de Luz, ésta en su testamento le deja a Jett una pequeña parcela en medio del inmenso rancho.
Leslie visita a Jett en su pequeña propiedadque se siente secreta y acomplejadamente atraído por ella.
Jett se ofrece a llevar a Leslie a la zona donde viven en penosas condiciones los peones mejicanos del rancho.
 La sensibilidad de Leslie choca con el clasismo un tanto racista de su marido, algo muy arraigado en todos los terratenientes de esa parte del país.
 Elizabeth Taylor y Rock Hudson posando como el matrimonio Benedict.

SINOPSIS:
En los primeros años veinte del pasado siglo, un ganadero texano viaja hasta Maryland para adquirir un purasangre. Durante su estancia allí se enamora de la refinada hija de sus anfitriones y tras un corto romance se casa con ella. De regreso a Texas en compañía de su joven esposa, ésta habrá de enfrentarse con un mundo árido y desconocido para ella en el inmenso rancho de su marido. Excluida de algunas actividades que el inmovilista machismo de su marido no la permite desarrollar, al poco tiempo trabará amistad con un peón de carácter retraído, deseoso de prosperar, resentido con su patrón y secretamente enamorado de ella, el cual hereda una pequeña parcela en la que encuentra petroleo, viendo así cumplida su ambición de ser rico y poderoso. Con el paso de los años, el antagonismo entre los dos hombres aumentará, pero el devenir de la historia irá poniendo las cosas en su sitio.

 La chica de Maryland adaptándose a un paisaje muy distinto como es el de las resecas planicies texanas.
 El día que murió Luz, su único apoyo en el rancho, Jett se sintió desamparado.
 James Dean no fue la primera elección para el papel de Jett Rink. Ahora resulta imposible imaginar el personaje con otro físico.
 Leslie, que ha abandonado a Jordan, regresa a su antiguo hogar de Maryland para asistir a la boda de su hermana. Pero su marido se presenta durante la ceremonia.
 En su afán de superación, Jett encuentra finalmente petróleo en su propiedad.
 Enloquecido por el hallazgo, se presenta con su destartalada furgoneta en la mansión Benedict para restregárselo a su antagonista Jordan.
 Este es Angel Obregón II (Sal Mineo), orgulloso de vestir el uniforme. Fue el bebé de una familia de peones que Leslie atendió y salvó en su nacimiento.
 Con el paso de los años, Luz Benedict II (Carroll Baker), hija menor  de Leslie y Jordan, es ya una jovencita con las ideas no demasiado claras.
 Jordan Benedict III (Dennis Hopper) se ha casado en secreto con Juana Guerra (Elsa Cárdenas), hija del doctor que atiende a los peones.
 A la gran fiesta que organiza el ahora multimillonario Jett Rink asisten todos, pero la esposa de Jordan Benedict III es rechazada por ser mejicana y su marido se le enfrenta.
 Jett, en apariencia lo ha conseguido todo pero durante todos estos años, rodeado de socios, abogados y aduladores, ha estado solo y profundamente frustrado por el amor imposible que siempre sintió por Leslie.

COMENTARIO:
Los "novelones" de Edna Ferber solían salir muy favorecidos con las adaptaciones cinematográficas. Tanto las versiones musicales de MAGNOLIA (Show Boat) realizadas por James Whale en 1936 y George Sidney en 1951, CIMARRÓN en la versión de Anthony Mann, como GIGANTE, se elevaron desde la pantalla muy por encima de las discutibles virtudes de su fuente literaria.

En GIGANTE, la saga de una familia texana a lo largo de dos generaciones es la base para una visión extendida y severamente crítica del espíritu ingenuo, prepotente y fascista de los texanos. Pero la película es sobre todo el apasionante estudio de tres personajes -en un dilatado arco temporal- que merced al inspirado y a la vez concienzudo trabajo que sobre ellos efectuó George Stevens (todavía bajo los efectos del rayo creador que dos años antes le llevara a realizar su gran obra maestra, RAÍCES PROFUNDAS) y a una sorprendente pero inteligente elección de actores, trascienden los ar­quetipos que representan y se convierten en carismáticas criaturas observadas con atención y dibujadas con puntilloso detallismo, marca de fábrica de la narrativa stevensiana. 

William Wyler llegaba en ocasiones a rodar decenas de veces un mismo plano hasta conseguir con precisión lo que deseaba extraer del actor o actriz. George Stevens también utilizaba este tozudo perfeccionismo y el método solía dar brillantes resultados. Como demostración de ello, tanto Elizabeth Taylor, delicada y precisa, como Rock Hudson, sobrio y creible, consiguieron cada uno memorables trabajos. Pero fue el joven James Dean (que moriría en un accidente tan previsible como estúpido estrellándose con su Porsche Spyder apenas concluido el rodaje) quien alcanzaría la gloria post mortem componiendo un introvertido, revanchista y multipolar Jett Rink. 

NOTA: A propósito de este personaje, George Stevens había ofrecido el papel al misterioso y angélico Alan Ladd, del que había quedado plenamente satisfecho con su trabajo en RAÍCES PROFUNDAS (Shane). Pero el actor, siempre dubitativo y acomplejado, se dejó influir por los equivocados consejos de su esposa-manager Sue Carol y acabó rechazando la oferta por la estúpida razón de que su nombre en los créditos iría en tercer lugar, demostrando con ello una fatal ausencia de olfato ya que su personaje era con mucho el más atractivo. 

8 comentarios:

  1. He visto esta película un montón de veces y siempre me deja fascinada, me encanta. Tiene escenas de esas que se te quedan grabadas primero en la retina y luego para siempre en la memoria. Por ejemplo, aquella de la boda de la hermana de Leslie, donde aparece mi querido Rod Taylor, o ese momento cuando llega Jordan durante la ceremonia y Leslie le mira o le presiente sin darse apenas la vuelta. Ay! esa mirada de Jordan. Y la escena en que Jordan obliga a su hijito a montar el pony. Y cada vez que Leslie se enfada y saca su genio. Ese maravilloso primer plano de Liz Taylor en la mansión de los Benedict que has incluido en una de tus fotografías. Qué guapísima está.
    Todos los personajes, tanto los principales como los secundarios, están maravillosamente interpretados. No imagino otro Jett que no fuera James Dean. Tenía entendido que murió durante el rodaje y que algunas escenas fueron rodadas por otro actor. Veo que no comentas nada sobre eso así que imagino será otra de esas leyendas urbanas...
    Un abrazo.

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    1. Lo cierto es que GIGANTE está repleta de momentos como los que mencionas. Yo diría que este film es un colosal ejemplo del cine que hizo grande a Hollywood: narrativa, contenido, espectáculo y emoción. Bienaventurados los que fueron (fuimos) educados con aquellas películas.
      En cuanto a ese rumor que mencionas sobre la muerte de James Dean, es cierto que ocurrió cuando el rodaje no estaba rematado. Pero, que yo sepa, todas las escenas que vemos con Dean, es Dean y no ningún doble. Lo que sí hubo que "arreglar" fue la voz pues su fallecimiento impidió que él se doblara en estudio a sí mismo en los fragmentos en que el sonido directo no funcionó con la necesaria nitidez, algo habitual en tomas de exteriores. Para solucionarlo, tuvieron que recurrir a un actor, Nick Adams, que imitara su voz.
      Un abrazo.

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  2. GIGANTE es simplemante gigante, una ambiciosa superproducción que no renuncia al intimismo y he de decirte que me parece, siempre me ha parecido, una obra maestra que va tocando diversos temas, tanto la familia, el progreso de la sociedad (las personas con poder económico dejan de ser lo que eran... lo que en este caso llamaría "despóticos nuevos ricos"), ah, y el amor. La historia que nos cuentan es muy buena sobre todo porque esa saga familiar viene condimentada con cierta carga crítica dentro de un contexto tan acentuadamente racista y conservador como es el estado de Texas de la primera mitad del siglo XX, aunque a decir verdad no creo que las cosas hayan cambiado mucho desde entonces. Dado que desde el comienzo de la película hasta el final transcurren muchos años podemos ver cómo evolucionan los personajes (ay, ese maquillaje envejecedor), sobre todo los de James Dean y Rock Hudson ¡qué bien están los dos! que en el devenir de los acontecimientos efectúan un recorrido en sentido contrario.
    Teo, para escribir estas líneas en tu blog he hecho un alto en la lectura de “Hay más que mueren de desamor” de Saul Bellow, premio nobel 1976, que junto a Marcel Proust y Martin Amis son mis escritores de cabecera. En cualquier caso, yo jamás moriría de desamor.
    Perdona mis digresiones. Hasta otra.

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    1. Vaya! siento tener que confesar que de Saul Bellow sólo he leído la novela "El legado de Humboldt" cuando aún conservaba mi cabellera, y creo recordar que fue por la que le dieron el Pulitzer poco antes del Nobel. En su día, me impactó, pero ahora la tengo ya muy desdibujada en el recuerdo. "Hay más que mueren de desamor" siento no conocerla, pero tomo nota. Caray! sí que son eclécticos tus gustos literarios. Que Proust sea tu escritor de cabecera, lo entiendo pues él siempre escribía en la cama (perdona el chiste fácil). En cuanto a Martin Amis, es curioso que yo le recuerde más por ser uno de los niños raptados por los piratas en la espléndida VIENTO EN LAS VELAS de Alexander Mackendrick (era el mayor de ellos, el que se cae por la ventana y muere) que por la novela que conozco de él "Tren nocturno" (no comprendo cómo David Fincher no ha hecho ya una adaptación cinematográfica con ese enrevesado y oscuro relato policiaco-detectivesco con tanta trastienda). También escribió el guión de la peor película de Stanley Donen, SATURNO 3.
      Hay mucha gente muerta por desamor, podría asegurarlo. Andan por ahí, de un lado para otro, sin saber que están "muertos". Me alegra que tú no seas uno de esos zombies.
      Albricias por ello!.

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  3. Con todos mis respetos para el bueno de Ladd, aún esforzándome no le veo aportando al personaje de Jett los matices psicológicos que le confirió el eternamente moderno James Dean. Por cierto, qué bien se le daba a Stevens eso de rodar escenas de pelea a puñetazo limpio.
    Un saludo.

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    1. Por aproximación afectiva no soy la persona más cualificada para juzgar con "objetividad" la reincidente elección de Alan Ladd por parte de George Stevens. Para él, este actor constituyó un auténtico descubrimiento porque nunca había reparado en él. Para el papel de Shane había elegido a Montgomery Cliff (!) y más tarde, creo, a William Holden. Ladd fue un tercer plato.
      Partiendo de la premisa de que Stevens no era tonto, me atrevo a suponer que vio en la persona (no en el actor) de Ladd muchas concomitancias con el personaje de Jett (hablo del Jett de la novela de Ferber, no del resultante de la composición de James Dean) que bien encauzadas y utilizadas obrarían en favor del dibujo de ese complejo personaje en la pantalla.
      En cualquier caso, resulta estéril hacer conjeturas. James Dean superó la desconfianza de Stevens (durante el rodaje, se amargaron mutuamente la existencia) y nos ofreció una interpretación difícil de intercambiar con ningún otro posible actor.
      Y sí, de acuerdo en que Stevens filmaba muy bien, con mucha fisicidad, las peleas a puñetazos; la de Ladd con Ben Johnson en SHANE o la desigual de Rock Hudson con el descomunal dueño del "Diner".
      Un saludo.

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  4. No me acostaré sin saber una cosa más pues ignoraba que Alan Ladd fuera, entre los candidatos para el papel de Jett Rink, el que realmente quería George Stevens. Lo cierto es que en "Raíces profundas" estuvo legendario. Podría decir que fue una lástima que por un mal consejo el protagonista de "Shane" perdiera esa ocasión, pero la composición de Dean resultó memorable y revolucionaria.
    Saludos.

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    1. Es curioso cómo el azar (o el destino) juega malas pasadas a las personas. El rechazo por parte de Ladd de la oferta para incorporar al Jett Rink de "GIGANTE" le acarreó una prematura decadencia profesional y aumentó sus complejos e inseguridades hasta su final (aunque no está muy claro, parece ser que se suicidó disparándose un tiro) con tan sólo 50 años.
      Por otro lado, James Dean heredó ese papel y a consecuencia de ese rodaje, las circunstancias le llevaron a estar un determinado día, a una determinada hora en la carretera de Paso Robles, donde perdería la vida estrellándose con su Porsche contra otro coche que se le cruzó.
      En fin, cosas.
      Un saludo.

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