FARAÓN (Faraon / Pharaoh)

(Pol) Zespól Filmowy "Kadr", 1965. 183 min. (versión íntegra). Color. Dyaliscope.

G: Jerzy Kawalerowicz y Tadeusz Konwicki, basado en la novela de Boleslaw Prus (Aleksander Glowacki). Ft: Jerzy Wójzik. Mt: Wieslawa Otocka. DP: Jerzy Skrzepinski. Vest: Maria Czekalska, Andrzej Majewski, Barbara Ptak y Lidia Rzeszewska. Ms: Adam Walacinski. Dr: Jerzy Kawalerowicz.

Int: Jerzy Zelnik, Barbara Brylska, Wieslawa Mazurkiewicz, Krystyna Mikolajewska, Ewa Krzyzewska, Piotr Pawlowski, Leszek Herdegen, Jerzy Buczacki, Stanislaw Milski, Kazimierz Opalinski, Mieczyslaw Voit, Alfred Lodzinski, Andrzej Girtler.

Los días de anciano faraón Ramsés XII (Andrzej Girtler) stán llegando a su fin.
Este es el joven príncipe Ramsés (Jerzy Zelnik), herrero del trono de su padre.
Un canal excavado en la arena debe ser cegado para el paso de las tropas.
Durante unas maniobras militares en el desierto, el futuro faraón tiene su primer enfrentamiento con Herhor (Piotr Pawlowski), el poderoso sumo sacerdote.
Como una inesperada aparición en el desierto tenemos a Sarah (Krystyna Mikolajewska), una muchacha hebrea.
El joven Ramsés queda prendado por la belleza de la joven y ordena a su amigo Tutmosis (Jerzy Buczacki) que la lleve a palacio.
Sarah se muestra reticente pero ha de asumir su papel como concubina de Ramsés.
Ahí los tenemos como una pareja de tortolitos, él noble egipcio y ella hebrea sin rango.
Nuestro futuro faraón no está conforme con el poder acumulado de los sacerdotes.
Y aquí le tenemos, siempre rodeado y vigilado por esa casta privilegiada.

SINOPSIS:
El joven Ramses, heredero y sucesor de su padre, el Faraón Ramses XII, es el comandante del ejército imperial y no está de acuerdo con las intromisiones en política de los sacerdotes que han firmado un acuerdo secreto con Asiria, según el cual Egipto mantendrá el control de Judea a cambio de abandonar todos sus derechos sobre Fenicia. Los banqueros fenicios, asustados, recurren al príncipe tratando de convencerle de que declare la guerra a los asirios. Cuando el viejo faraón muere y el príncipe accede al trono, su antagonismo con los sacerdotes se acentúa y tratará de frenar su creciente poder.

El delicado momento político por el que pasa Egipto inquieta a sus vecinos fenicios y asirios que buscan un cierto equilibrio de poder para sus dependientes países.
Herhor acompaña en un viaje por el Nilo a Nikotris (Wieslawa Mazurkiewicz), la preocupada esposa de Ramsés XII. Motivos no le faltan a la regia señora.
El oscuro cerco que envuelve al joven faraón, en ocasiones adquiere caracteres fantasmagóricos.
No le resulta fácil su empecinada lucha por cambiar el estado de cosas cuando no se tiene la experiencia ni la astucia de los poderes fácticos, la casta sacerdotal.
Otra sutil trampa tendida a Ramsés XIII: la oportuna aparición de una seductora sacerdotisa que se encarga de enredarle en juegos que le distraigan de sus objetivos.
Mientras se encuentra entre los brazos de esa mujer, nuestro atribulado faraón no sabemos si logra pensar con la necesaria lucidez.
Uno de los objetivos de Ramsés XIII es conseguir llegar hasta  los tesoros  acumulados por los sacerdotes en un oscuro y laberíntico lugar. De conseguirlo, perderían su poder y ese oro serviría para remediar los problemas económicos del país. Un antiguo sacerdote de Seti asegura que él puede llegar hasta esa inencontrable estancia.
Una última baza sabiamente utilizada por Herhor para seguir sometiendo a una plebe que pide su cabeza: sabedor de un inminente eclipse, lo utiliza para atemorizarlos con esa oportuna oscuridad que atribuye a los dioses enfadados. El inculto pueblo cae de rodillas.
Ahí le tenemos en plena pantomima que previsiblemente da el resultado pretendido.
 Para rematar la calculada faena, el faraón cae en la última y definitiva trampa.

COMENTARIO: La portentosa secuencia inicial arranca con el primer plano estático de una superficie lisa de arena que es cruzada por dos escarabajos sagrados arrastrando una bola de estiércol. En los siguientes quince minutos asistimos al desarrollo de unas maniobras militares durante las cuales el Sumo Sacerdote que las supervisa, desoyendo las protestas del príncipe, ordenará a las tropas dar un rodeo para evitar la zona cruzada por los dos escarabajos aunque para ello han de cegar un canal que le costará la vida al esclavo que lo construía. Esta acción absurda y terrible que choca con el sentido de la lógica del príncipe, le llevará a una gradual toma de conciencia de la realidad de su pueblo, un Egipto debilitado y miserabili­zado por el freno que para cualquier avance representa el dominio de la casta sacerdotal. 

Estamos ante una impresionante superproducción sustentada sobre un sólido e inteligente guión con claras connotaciones políticas. La perfección de todos los elementos que conforman la puesta en escena, desde los decorados, los utensilios y el vestuario, rigurosos y documentados, hasta la brillante utilización del color y el formato scope, pasando por la música y las estratégicas geometrías creadas por la cámara y el movimiento de los actores dentro del encuadre, conforman una obra única, de fascinante complejidad. El corazón de la historia que nos cuentan se haya en ese indivíduo que tras luchar con todos los medios a su alcance tratando de modificar la realidad, acaba sucumbiendo a las sutiles redes tejidas a su alrededor por las fuerzas que le rodean, pereciendo en la oscuridad sin que su lucha haya servido para nada. Sin embargo, el evidente pesimismo de esta conclusión sirve para acentuar las claves del discurso.

15 comentarios:

  1. La luz y las sombras de un gobernante poderoso sólo en apariencia. El film de Kawalerowicz es rico en significados y bellísimo visualmente.

    Saludos.

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    1. Unos significados que se traducen en un implacable discurso sobre la instrumentalización de una cultura -restringida al pueblo- utilizada como elemento de dominación que perpetúe el poder de la casta.
      Un saludo.

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  2. Me parece una extraordinaria película, sin duda, a años luz de las producciones de cartón piedra hollywoodenses. No obstante, puestos a elegir, de Kawalerowicz prefiero la dreyeriana "Madre Juana de los Ángeles".
    Un saludo.

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    1. Efectivamente, el film de Kawalerowicz poco o nada tiene que ver con algunas superproducciones salidas del Hollywood clásico. Lo que no quiere decir que películas como la magnífica TIERRA DE FARAONES de Howard Hawks, o LOS DIEZ MANDAMIENTOS de De Mille sean productos desdeñables ni mucho menos. Si acaso, están en otra onda.
      MADRE JUANA DE LOS ÁNGELES fue la película que en su día me descubrió a este realizador. Un ascético e impresionante ejercicio de una quirúrgica precisión narrativa en sus intenciones. Y sí, yo no lo hubiera dicho con esa frontalidad, pero sus imágenes tienen un halo "dreyeriano".
      Un saludo.

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  3. He tenido ocasión de verla varias veces. Primero en pantalla grande, en la Filmoteca, y después en casa en DVD. Y siempre me ha parecido igualmente soberbia. Me encanta particularmente el momento en el que los soldados golpean sus escudos con las espadas: realmente épico.

    Saludos.

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    1. Imagino el esfuerzo de producción que debió suponer el rodaje de esta película (ese rodaje tuvo lugar en varios países, incluido Egipto, claro) jalonada con diversas secuencias de impactante resolución. Tú mencionas ese momento de los escudos que defines como épico; así es.
      Un saludo.

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  4. La época de las grandes superproducciones hollywoodenses que nos deparó algunas joyas como esta.

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    1. Bueno, en 1965, tras el descalabro económico que supusieron títulos como CLEOPATRA y LA CAÍDA DEL IMPERIO ROMANO, la época de las grandes superproducciones había tocado fondo. En aquellos momentos, esa concepción mastodóntica de películas que nos contaban historias del "mundo antiguo" tuvo que echar el freno.
      En cualquier caso, creo no haberte entendido bien cuando parece que incluyes FARAÓN entre esas superproducciones hollywoodenses. Esta es una película polaca que si bien más arriba, por razones que explicamos, la comparábamos con TIERRA DE FARAONES, fue concebida desde parámetros muy alejados de los utilizados en la Meca del cine.

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  5. Hola Teo: Desde hace unos años tengo el DVD de "Faraón" en una edición de auténtico lujo. Puede que por otras prioridades y también un poco por pereza, me avergüenza confesar que tardé varios meses en visionarla. Te agradezco el impulso que me ha dado tu comentario porque me ha "obligado" a caer sobre ella de nuevo dedicándole tres horas de mi vida en esa revisión y me ha vuelto a dejar impresionada ¡vaya peliculón! Eso que dices casi me sabe a poco pero es así. ¡Y la he tenido en mi casa todo ese tiempo sin prestarle la atención que merecía!
    Un abrazo.

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    1. Bueno, bueno, Aurora, no te mortifiques más. Ya la has visto que es lo importante. Y sí, se podían haber dicho más cosas de esta película porque su complejo contenido da para mucho más, qué duda cabe. En este sentido, te aconsejo (aunque no creo que sea necesario) que vuelvas a visionarla más adelante, ya libre de esa tensión que produce el desarrollo de su argumento cuando se ve por vez primera. Siempre se descubren nuevas cosas, detalles que se escapan.
      Efectivamente, la edición en DVD que apareció hace como un año, era espléndida y nos daba por fin la oportunidad de verla en versión íntegra, tal como se estrenó en el Festival de Cannes de 1966.
      Hasta la próxima, un abrazo.

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  6. Habéis mencionado una película que me encanta, "Tierra de faraones". Creo que es comparable con "Faraón" por muchos motivos. Ambas me parecen obras maestras y funcionan sin eludir el exotismo y lo espectacular, y las dos se adentran con bastante rigor en los entresijos de aquel mundo lejano y muy bien organizado. "Tierra..." parece más convencional porque utiliza las herramientas propias de un melodrama pero como a "Faraón", también se le ven las intenciones lo que en cierta medida las hermana.
    Un saludo.

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    1. Muy oportuna tu comparación y estoy totalmente de acuerdo con ella. Tienen muchos puntos en común. Viendo primero la de Hawks y a continuación la de Kawalerowicz, las correspondencias quedan muy claras, pese a tener métodos y soluciones narrativas, en apariencia, muy diferentes.
      Un saludo.

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  7. Hola, Teo: Me ha costado conseguirla, ha sido en un videoclub superviviente, pero por fin he podido ver esta película. Desde que leí tu comentario, primero hace algún tiempo en tu libro y ahora aquí, tenia ganas de hacerlo y no me ha defraudado. Me ha parecido una gran película y el tema que trata, desgraciadamente continúa teniendo plena vigencia. La banda sonora se adapta perfectamente a las imágenes. Es impresionante, a veces no escuchar un sólo sonido, o escuchar los pasos o la respiración entrecortada simplemente. Angustiosa y claustrofóbica secuencia la de ese personaje que busca la cámara del tesoro y acaba perdiéndose en los oscuros pasadizos (yo acabé respirando como él).
    Gracias por descubrírmela.
    Un abrazo.

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    1. Nunca es tarde si la película es buena. Aún recuerdo la honda impresión que me causó cuando la vi por vez primera en su estreno comercial en España (y eso que entonces, entre la distribuidora y la Junta de Censura, nos escamotearon más de una hora de su metraje original). Hurra por esa estupenda edición en DVD patrocinada por FNAC que en su día nos la ha restituyó íntegra. En fin, me alegra que te haya gustado y espero hayas podido recuperar el aliento después de la escena que describes, una de las más desasosegantes de la película.
      Un abrazo.

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